Aquella madrugada hacia frío, pero eso era lo de menos,
Alexei Klimenko ya solo pensaba en respirar era lo único que tenia sentido en
aquellos días, sobrevivir en la barbarie , sentía que el mundo se estaba
volviendo loco. Había luchado en la
defensa de Kiev contra los alemanes más de 500.000 persona muertas para nada. Los
Nazis mucho mejor preparados y la incompetencia de los generales de Stalin
habían provocado la caída, tantas vidas sesgadas, tanto odio y terror; A Alexei
le temblaban las manos, no lograba
conciliar el sueño y las pocas veces que por puro cansancio lo conseguía, solo
tenia pesadillas en las que aparecían cadáveres y sangre.
A veces cerraba los ojos y recordaba a su abuelo el le había
regalado aquel balón del que nunca se separaría en su niñez. Añoraba los
primeros partidos en las calles y las riñas de su madre recordandole que había
gastado otro par de zapatos.
Su posición en el campo
era la de defensa aunque no el tipico jugador brusco, su fisico podía
llevar a engaño, era alto y fuerte, veloz para cortar la jugada y robar el balón limpiamente, pero sobre todo
era elegante en su juego no le gustaba dar balonazos, a pesar de los gritos de
desesperación de sus compañeros, el siempre salía con el balón controlado desde
su propia área, driblando a los rivales que salían a su paso, su potente
zancada y seguridad se lo permitían, cuando avanzaba de esa forma sabía que
marcaría y que los gritos de advertencia se transformarían en admiración.
Si eso le ayudaba a respirar cada día el recuerdo de su
familia y el futbol, siempre se le había dado bien, por ello antes de la guerra
jugaba en el equipo más importante de la ciudad el Dinamo, allí conoció a
Nicolai Trusevych, era el portero y capitán , le conocían como “el muro” porque
todos los delanteros se estrellaban contra el, cuantos partidos les había
salvado el bueno de Nicolai. Gracias a el había encontrado aquel trabajo en la
panaderia nº 3 eso les permitía sobrevivir aunque algunos les acusasen de
colaboradores, ellos no lo eran, no les había quedado otro remedio estaban
obligados a vivir en la más absoluta indigencia, los alemanes no les permitían trabajar, ni
cobijarse en casas , era una forma de condenarles a malvivir como mendigos
soportando las bajas temperaturas. Por eso cuando aquel aficionado del Dinamo
de origen aleman llamado Josef Kordik, encontró a Nicolai tirado en la acera,
no dudo en ayudar a uno de sus ídolos futbolísticos ofreciéndole trabajo en su
panadería y el gran Capitan siempre pensando en el equipo fue en busca de todos
sus compañeros del Dinamo , finalmente logro encontrar a 7 y 3 del Lokomotiv.
Alexei Klimenko todavía se estremece al recordarlo, no se habían vuelto a ver
desde la guerra, aquellos jóvenes y vigorosos deportistas se habían convertido
en fantasmas pálidos y desnutridos. Con el tiempo algo habían mejorado
trabajaban de sol a sol en la panadería, pero al menos no eran indigentes. Un
día el avaro Josef Kordik llego con una
sonrisa de oreja a oreja había ofrecido a las autoridades alemanas disputar una
serie de partidos amistosos contra sus trabajadores, el obtendría ingresos por
las entradas y asi el Tercer Reich demostraría la supremacía de la raza aria,
después de todo Alexei Klimenko y los suyos seguían desnutridos y en algún caso
con neumonia. Nicolai en representación de todos acepto jugar pero exigio
vestir de rojo, con un guiño a sus compañeros, les dijo:
-Quiza no tengamos armas, ni apenas comida pero os aseguro
una cosa, todavía tengo orgullo, nos han derrotado y sometido pero todavía no
nos han vencido, pienso dejarme la piel en el campo y vencer a los fascistas
con los colores de nuestra bandera, lucharemos en el terreno de juego. Quien
esta conmigo ?
-Todos estamos contigo. Respondio un entusiasmado Alexei
Klimenko al igual que el resto de sus compañeros.
Esta lloviendo el agua se va calando poco a poco en los
huesos, Alexei camina descalzo por un camino enfangado con la cabeza agachada,
se sonrie y sigue recordando:
Los Nazis estaban rabiosos y trajeron a su mejor equipo, el
Flakelf formado por pilotos de la
Luftwaffe decididos a demostrar su superioridad, fisicamente
eran muy superiores autenticos tanques alemanes dispuestos a aplastar a los
ucranianos, pero como siempre el invencible FC Start gana
5-1.
El 9 de Agosto de 1942 se celebra la revancha, Alexei lo
recuerda perfectamente estaba sentado atandose las botas cuando entro el
arbitro un oficial de las SS gritando:
-Espero que os atengais a las reglas y realizaies el saludo
a mano alzada gritando Heil Hitler. También espero que no tengáis intención de
ganar si queréis conservar vuestras vidas, no se si me he explicado bien rojos
de mierda!!, pienso encargarme personalmente de ello.
El oficial salio dando un portazo y el silencio se hizo en
el vestuario, como siempre fue Nicolai el que lo rompio:
-No estaréis pensando en dejarnos ganar, decidme desde
cuando comenzo la guerra como os sentis nos han quitado nuestros hogares,
nuestras familias, nuestros amigos, en definitiva nuestras vidas. No os dais
cuenta en realidad ya estamos muertos, solo nos sentimos vivos cuando entramos
al campo y luchamos por la victoria, si nos quitan eso el orgullo y el honor ,
ya no nos quedara nada. Prefiero un instante de libertad que una vida repleta
de miseria y cobardia.
El F.C.Start grito con jubilo y vitores las palabras de su
capitan y salieron al campo con la cabeza alta
se colocaron frente al palco donde una inmensa esvastica les
contemplaba, los alemanes del Flakelf realizarón el saludo a su Führer. Los
ucranianos permancen impasibles y gritan “Fizculthura” un slogan sovietico. El
oficial de las SS se muerde el labio y una comisura de sangre asoma en su rostro,
la furia se acumula en su mirada al realizar al sorteo de campos, mira a
Nicolai y se le acerca susurrandole al oido.
- Vais a pagar vuestra arrogancía, más te vale perder porque
sino pienso enviaros a una fosa repleta de judios sarnosos como vosotros.
Alexei que habia visto la escena se acerca y le pregunta a
Nicolai:
- Que te ha dicho?
Nicolai, sonrie y responde:
- Nada me ha deseado suerte y que juguemos limpio.
- jajajaja sabes Nicolai pase lo que pase ha sido un placer
jugar contigo.
Los dos amigos estrechan sus manos y se conjuran para ganar.
El encuentro da inició los hombres del F.C Start con mayor
dominio tecnico se hacen con el control del juego, la grada empieza a
vitorearlos. Esto no sienta bien a los Nazis que empiezan a practicar juego
subterraneo, las zancadillas, escupitajos, agarrones, patadas, tirones de
camiseta, se suceden una y otra vez, las protestas al arbitro son recibidas con
una sonora carcajada y desprecio por parte del colegiado, para los alemanes que juegan ese partido lo
importante no es el balón sino derribar y destruir al adversario. En el
meridiano de la primera parte un germano del Flakelf lanza un corner, Nicolai
salta como un león rodeado entre cinco alemanes y se hace con el esferico, al
caer al suelo un aleman le golpea de forma intencionada la cabeza de un
puntapie “el muro de Kiev” pierde el conocimiento, el balón se escapa
lentamente de sus manos circunstancia que es aprovechada por un delantero
aleman para anotar el primer tanto.
Alexei Klimenko lo ha visto todo, en el se acumulan la rabia contenida:
-Dios Mio Nicolai, Nicolai!!! Despierta!!!
La sangre brota a borbotones por la cabeza de aquel gigante,
aturdido respira con dificultad pero poco a poco recobra el conocimiento.
- Solo ha sido un rasguño. Vamos sigamos jugando tenemos que
remontar.
- Quiza deberiamos dejarlo. Esto no es futbol es una
carniceria. Mirate estas desangrandote.
- Mirame tu bien Alexei , nunca repito nunca nos rendiremos,
vamos a ganar este partido aunque sea lo ultimo que hagamos en nuestras vidas.
Entendido, así que moved el culo y empezad a jugar a futbol o os las tendreis
que ver conmigo en lugar de con los Alemanes.
Los muchachos del FC Start, se sonrierón Nicolai siempre
encontraba la forma de motivarlos y espolearlos.
Empezarón a jugar de forma más veloz, el balón iva tan
rapido que a pesar de que seguían recibiendo entradas escalofriantes, los
alemanes siempre llegaban tarde.
Se acerca el tramo final del primer tiempo y Kuzmenko recibe
un balon en el vertice del area grande se dispone a disparar cuando nota un
crujido estremecedor en su espalda, un defensa le clava los tacos.
El oficial de la
SS pita la falta y piensa para si: Era demasiado exagerada y
después de todo hay Ucranianos en las gradas, tampoco es cuestión de provocar
altercados, ademas estos sacos de mierda andantes, no deben saber ni tirar una
falta.
Kuzmenko dolorido aun se levanta a duras penas y guiña el
ojo a sus compañeros, ellos se sonrien porque saben que antes de la guerra ya
era conocido como “el francotirador” por su capacidad de marcar goles de falta
desde cualquier posición. Coloca el balón con esmero y dipara con el empeine
exterior, el balón silba en el aire como una bala, perforando la escuadra
alemana, habían empatado. Nicolai da saltos desde la portería, la grada
ucraniana se muestra euforica.
Suena el silbato, pero el arbitro no señala el centro del
campo, indica con aspavientos que se debe repetir el lanzamiento porque la
barrera se ha adelantado. Los Ucranianos no dan credito, se disponen a
protestar airadamente. Kuzmenko grita:
- No entreis en su juego!!! Dejadme a mi estaros callados
!!!
A regañadientes le hacen caso, Kuzmenko vuelve a colocar el
balón de la misma forma, observa la
barrera al igual que habia hecho anteriormente y lanza de nuevo la pelota
describe la misma parabola entrando otro vez por toda la escuadra alemana. El
oficial de la SS
casi se traga el silbato atonito y no le queda más remedio que conceder gol.
El gol ha desmoralizado a los alemanes, que se ven desbordados,
en una jugada por banda derecha, el incisivo Goncharenko logra el tanto que pone
por delante a los Ucranianos. A falta de un minuto para el final del primer tiempo, Kuzmenko
finta a un aleman amagando el regate y realiza un disparo seco y duro desde
fuera del area que coloca el 3-1. El publico apluede a rabiar. El oficial de la SS contrariado no espera a los
45 minutos y decreta el final del primer tiempo.
El F.C. Start esta euforico en el vesturiario todo son
vitores de animo. De pronto entran dos soldados armados , les precede el
colegiado de la SS :
- No lo habeis entendido verdad!!! Os lo voy a repetir
porque se reconocer a retrasados mentales y
vosotros lo sois no hace falta mas que veros. O perdeis el partido o os
fusilo en el centro del campo y no solo eso me asegurare de encontrar a todos
vuestros familiares vivos, en esta asquerosa cloaca de ciudad y matarlos
lentamente para que recuerden a los retrasados de sus parientes. Espero que
esta vez os haya quedado claro.
Nicolai se acerca altivo mirando fijamente al oficial de la SS :
- Si somos retrasados, vosotros los Nazis no deberíais tener
ningún problema para ganarnos después de todo sois una raza superior no ?
El colegiado pleno de colera
golpea a Nicolai en el estomago dejandolo sin aire, mientras uno de los
soldados impacta en la cara del arquero desguarnecido con la culata del Rifle ,
sus compañeros intentan ayudarle, pero los rifles de los soldados les apuntan.
- Putos comunistas de mierda!!! He visto burros mas
inteligentes, vámonos van a morir de todas formas.
Los soldados y el arbitro Nazi se retiran. Un tenso silencio
se ha apoderado del vestuarios del F.C. Start.
Nicolai escupe sangre
arrodillado. Se levanta con dificultad y contempla a sus compañeros, con una
muesca de dolor, emite una sonora carcajada.
Alexei lo mira pensando que su amigo a perdido
definitivamente el norte.
- De que te ries Nicolai, nos van a matar no lo entiendes,
no tiene ninguna gracia maldita sea.
- Estaba pensando, que yo he visto burros jugar mejor al
futbol que estos Nazis, la verdad es que los burros deben ser una raza superior
respecto a los Nazis jajjajaja
Alexei atonito lo mira y poco a poco empieza a reirse, sus
compañeros no pueden evitar imitarle, es tal la hilaridad que a alguno se le
saltan las lagrimas de pura risa, hacía tanto tiempo que no sonreían que
parecían haberlo olvidado
- Camaradas tenemos un partido que ganar.
La potente voz de Nicolai resuena con contundencia, el gran
capitan coje sus guantes y cojeando por las multiples agresiones, se dirije al
terreno de juego seguido por sus compañeros.
Al salir al campo son vitoreados por sus compatriotas, que
ven como en la segunda parte, los alemanes siguen empleando todo tipo de tretas,
se lanzan hacia la porteria Ucraniana pero Nicolai detiene cada una de sus
embestidas, “ el muro” es infranqueable si no fuera por el colegiado que se inventa un penalty
inexistente y los alemanes recortan distancias.
Los Ucranianos no se achican llevados por una extraña fuerza
de convicción marcan dos tantos más, el publico enloquece con la entrega y el
valor que estan viendo. En el palco Nazi las caras son un poema.
Se encuentran en el meridiano del segundo tiempo. Cuando el
interior derecho del Flakelf lanza un balón bombeado, Nicolai salta con la pierna
buena y se hace con el esferico pero un delantero aleman entra con todo y lo
empuja dentro de la porteria, el oficial de la SS en su línea da el gol por valido.
Alexei Klimenko se siente frustado, comprende que por mucho
que ganen ese partido siempre habra un aleman dispuesto a arroyarlos y
pisotearlos como había hecho ese delantero. Ahí vienen otro vez atacan de
nuevo, el punta se dirige directo hacia la porteria Ucraniana. Alexei lo espera
con ojos de tigre, el jugador del Flakelf intenta zafarse escorandose a la
izquierda, el lo consigue el balón no, Alexei le ha robado la cartera como lo
venia haciendo desde niño. Esta en su area pero siente esa sensación, inicia
una cabalgada hacía el marco aleman, los rivales pasan, uno a uno, el primero
lo engaña con una bicicleta, los dos siguientes realiza una ruleta colandose
entre medio y dejandolos pasmados, al siguiente le tira un caño, ya ha pasado
tres cuartos de campo, no siente nada , no nota el cansancio, solo ve la
porteria, mientras realiza las jugadas, recuerda todo el dolor, la injusticia,
la frustación, el odio, la perdida que ha provocado esa guerra estupida. El último central del Flakelf intenta segarlo con
una entrada fea, Alexi salta como un resorte elevandose con el esferico y sigue
avanzando ya esta en area chica solo le falta el portero que sale desesperado,
Alexei amaga el tiro, el guardamete se lanza a la derecha. La pelota no se ha
movido de los pies de Alexei, que continua su carrera directo a puerta vacia,
ahí lo tiene todo para fusilarlos sería un gol antologico, la jugada ha sido
tan hipnotica, que no se escucha un alma en el
estadio. Alexei se detiene en la linea de gol con el balon, se gira
mirando a su propio arco, a pesar de la distancia siente la mirada de su amigo
Nicolai y comprende que nada tiene sentido, lanza un potente disparo hacia al
centro del campo y grita LIBERTAD!!!!!!!
Vuelve a nevar en el campo de concentración de Siretz,
Alexei continua caminando sabe que se dirige al pelotón de fusilamiento, como
le paso hace unos días a Nicolai, había sobrevivido a duras penas con la ración
de 150 gramos de hogaza al día. Hasta que a ese loco comandante, le dio por
liquidar uno de cada tres presidiarios. Aquel día le había tocado a el, casi
era mejor asi. Tiembla pero no importa pronto acabara todo.
El cabo aleman da la orden, el pelotón de fusilamiento
apunta se escucha el estruendo de las balas contra los cuerpos. Alexei cae en
la nieve, sigue vivo un dolor intenso se apodera poco a poco de su cuerpo,
sonrie si Nicolai estuviera allí , le diria – Lo ves Alexei no saben ni
disparar. Recuerda su niñez , a su abuelo, su madre, la familia, la amistad con
Nicolai y el futbol…
EPILOGO
Cuando el
Ejército Rojo recuperó Kiev en noviembre, la población había descendido de
400.000 habitantes a 80.000. El alivio fue relativo para los jugadores
supervivientes del F.C. Start. En un ambiente paranoico fueron vistos como
colaboracionistas. Unos años después cuando se conocio su historia fueron
usados por la propaganda socialista, como heroes.
El partido
entre el F.C. Start y el Flakelf nunca termino, los alemanes no soportaron ese
gol fallado adrede de Alexei el mas joven del equipo y tras esa jugada
suspendieron el encuentro.
Siete
décadas después, los poseedores de boletos para el partido del 9 de agosto de
1942 siguen teniendo libre acceso a los partidos del Dinamo. Y, a las puertas
del Start Stadium, un grupo escultórico de inconfundible inspiración en el
realismo socialista recuerda a los futbolistas que eligieron ganar antes que
vivir. "De la rosa sólo nos queda el nombre", reza su epitafio.
En diciembre
de 2010, siendo primer ministro de Rusia, Vladímir Putin discrepó en un
programa televisivo con un interlocutor, según el cual Rusia y Ucrania no
habrían ganado la
Segunda Guerra Mundial si no hubieran estado unidas en la URSS. “Habríamos ganado de
todas formas porque somos un país vencedor”, dijo Putin refiriéndose a Rusia.
Según el
dirigente ruso, la estadística de la época de la Gran Guerra Patria
indica que “las pérdidas más cuantiosas” se produjeron en el territorio ruso de
la URSS , “más
del 70%”. “Eso significa que la guerra se ganó, y no quiero ofender a nadie,
gracias a los recursos humanos e industriales de la Federación rusa”,
sentenció Putin.
Uno siente
tristeza de las declaraciones de Puttin, porque en una guerra nunca se gana,
siempre se pierde. Rusia perdio 27.000.000 de personas en la segunda guerra
mundial, perdieron todos pero la que más perdio fue Rusia. Por desgracia el
mundo esta lleno de Puttins en el poder gente dispuesta a repetir los errores de
la humanidad, por ello no conviene olvidar la historia de Alexei
Klimenko y el F.C. Start.
Si alguien quiere conocer más sobre el
tema, encontraran varios articulos en Internet solo deben buscar por “el
partido de la muerte”.
EL REPORTERO DE LA ROJA
EL REPORTERO DE LA ROJA
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